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| Pordioseros de Amor |
En uno de mis viajes al Océano Indíco cerca del Atlántico por donde se soportan las columnas de Hércules, me explicaron con grandes ejemplos la definición que tiene la expresión "cuenta chiles", o en esas épocas también usaban el término "cuenta ses_ames", de nada sirve recordar como fue que le decían, lo único real e importante definir en este universo reducido la expresión...
Los "cuenta chiles " o "cuenta sesames" son milenarios y han existido en todas épocas, pueden ser piratas, corsarios, marinos, padawans , personas, bueno "entes" pensantes pueden llegar a tener productos, mercancías, herramientas, o simplemente los que llamamos ahora "suspiros"; elementos necesarios para cualquier navegación de los mares, esperanzas que surten efecto apenas nos hacemos ilusiones a la mar.
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| Trate usted de contar los AMES |
El ensarte de un "negocio" puede suceder cuando se comienza a hacer un recuento de todo aquello que en sí puede obtenerse con gran facilidad, no digamos que los chiles en la actualidad valgan nada, puesto que conservan el picor y el sabor de la tierra donde fueron cultivados requiere de Sol, Tierra y condiciones climáticas idóneas. Muchas ocasiones los "cuenta ses-ames" realizan la proeza de llevar número de la cantidad de ajonjolís aunque se pierda tiempo, ilusión, confianza, suspiros (tan esenciales como la respiración en los Océanos Índicos) y hasta herramientas para el proseguir de una navegación u embarcación.
Cuando se trata de conseguir esas herramientas, enseres o mapas, los "cuenta ses ames" como su nombre lo indica cuentan los sesames, los sesames son "ajonjolís" de todos los moles. Es decir son pequeñas semillitas ricas en aceite, pero que por pequeñas es difícil cuantificar cuantas hay por ejemplo en un puñado de ajonjolís. Una persona que "cuenta los chiles" es aquella que lleva cuenta lo que da aunque sea irrelevante aunque sea evidente lo que da, pero que muchas veces requiere el reconocimiento para sanear sus cuentas pendientes consigo mismo porque lo que dio no vino del corazón sino de la avaricia, egoísmo o mera inseguridad, cualquiera de estás razones es suficiente.
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| El ajonjolí de todos los moles |
Como bien lo indique no es algo de cierta época, ya sean tiempos de Hércules o modernos, existen por otros lugares definiciones como la siguiente:
Los cuenta chiles son esas personas descendientes del Rey Salomón que viajan equipados con calculadora hasta para ir al baño, y que su religión no les permite pagar más de la cuenta (mucho menos aportar para la propina) en ninguna circunstancia.
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| Solo que quieran los chiles armar su corazón |
La única respuesta válida para cuando uno se topa con dichas personas, que muchas veces no se percatan de que han contraído la "enfermedad del cuenta chiles" mejor conocida como "pordiosero de amor" es seguir el sabio consejo de su servidora (aunque no sea sabio y no sea mio) de alejarse lo más posible porque la enfermedad puede llegar a ser "contagiosa" con el roce continuado, o bien simplemente cantar como la siguiente canción sin cesar . Still I Rise, i didn't give you permission to make me feel low.
[Leddra Chapman- All about you]
Recuerde siempre que cada historia es diferente, pero siempre hay más valia en la honesta humildad de no decir lo que se da, porque eso atribuye a que se espera recibir algo a cambio. Lo cual implica de igual forma que lo que se está otorgando no sale del corazón. Ya me cansaré de repetirlo cuando vuelva a estos escritos. Mientras tanto espero que de "algo" sirvan los "mismos" porque espero recibir (jajajaja) "algo" de los que me leen para luego "contarles" la infinidad de sesames que regale por medio de mis discursos piratas.
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| Cuenta Corazones Fresas |
Aunque sean de esas fresas que pones en los pies...
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| Fresas a tus pies |
Atentamente
La pirata come pasteles de corazón con fresas mientras deja pasar los "cuenta ses ames"
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| Esto si es un festín, ¿dónde está mi café? |
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