viernes, 20 de diciembre de 2013

Los cafés de nuestra vida / Les cafés de notre vie



Cada vez que nos hemos alejado, he notado que sólo es parar un tiempo, ni si quiera meditar... dejar que las cosas sigan su curso, que fluyan... he escuchado muchas veces... es como dejar de querer... Y en ese momento recuerdo lo bien que me siento tomando una taza de café, y eso mismo trato de invitar a la persona con la que me he molestado. Una taza de café...endulzada...o simple café caliente...¿y un porqué no?

Otras veces como hoy, casi estoy a punto de dejar de escribir en abierto campo de batallas, volver todo a un comienzo oscuro de escritos que nunca ven la luz, unas locuras que no muestran pies ni cabeza, puras fantasías, puras filosofías, reflexiones y refinamientos de una mente.

Aunque los haya, los que nunca la verán, dedicados y perdidos en la inmensidad de un "sin guardar" de la mala conexión. Unas amarras que se dejan ir en las tormentas, unos tripulantes cobardes que a la primera dan vuelta y les duele el corazón.

No valientes que nunca toman el barco, otros los hay que se escudan en la idea del diamante idealizado, creyéndose actores directos de ocasionar el brillo del grafito.

Pero luego canto el TAL VEZ
TAL VEZ usted le haga falta alguien como yo
TAL VEZ necesita alguien que escuche
TAL VEZ 
Requiera a alguien como yo
Y yo quiera y quiero
(Eres tan inalcanzable entonces)




Pero es tal mi insistencia
Que deplora mis intenciones
Se vuelve imagen de la súplica
De un querer sin querido
De un amar sin amado
De un soñar sin revuelto
Inalcanzable pareciera
Intangible, también incomprensible

¿Quién nos necesita?
De cualquier que sea visto
Hay un intentar de muchos que como yo
Piensan, creen, se ilusionan pensando un querer que no quiere
Un amar que no ama
Una posible mentira

Cariño hay, pero no como tal
Y ¿cómo decimos la verdad?
La verdad de los sentimientos
Que con la infinita eternidad todo se vuelve paradoja
O mejor dicho verdad
¿Es verdad que seremos amor?
Que somos amor, permaneciendo fieles a Dios
Seremos parte
Si continuamos




Me quedan imaginaciones, me quedan mis momentos de café, mis lecturas, mis escritos y esos sin sabores que por mucho que yo quiera, no deba ser. Mis ironías vueltas paradojas, mis metáforas metidas en mi mente que a todo le encuentra razones, descubrimientos y pocas dolencias, todas construidas para darle vida a un personaje.

¿Pero me he engañado?
O has prescindido de mi presencia.

Aunque me siento inspirada, no creo escribir por ahora ya más nada, en este...

Post dedicado al café de nuestra vida...








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