domingo, 28 de julio de 2013

Sufrir de gusto


(Lágrimas del Corazón- Los Tigres del Norte)

Cierto es que el sufrimiento es dolor profundo y queremos nunca llegar a ello.
Cierto es que esos tiempos se busca desaparecer, rehuimos del don de vida, mientras sufrimos.

Sufrimos como si se nos metiera en agua sulfurosa y nunca nos destruyera, mientras que la alegría viene a nosotros del cumplimiento de los deseos (sean buenos, malos o regulares). Y llegamos a la espléndida visión sentida del placer, vuelto éxtasis. Sonrisa y a veces llanto.

En este mundo, el sentimiento más profundo llega a ser SUFRIR, porque son más fuertes agonías las experiencias no cumplidas que la efímera alegría, que apenas llega se diluye con la razón de ser humano terrenal y de ser social.

Y mientras suceda así, en el mundo que se llama "equilibrado" a veces por gracia, don o carisma venido de Dios, se podrá decir que se SUFRE de ALEGRÍA.

Un posible SUFRIR DE GUSTO porque aunque humana mi conciencia, se duela sufriendo...mi alma contenta siente algo tan fuerte de PLACER,de ALEGRÍA como un sufrimiento.

SUFRIMIENTO de puro placer ...
¿Éxtasis? - No, no es
Es un sufrimiento, quemor constante en alegría, placer y dicha...




¿Podríamos vernos ahí un día?

(Stardust- Trailer)

5 comentarios :

  1. Muy bonita la foto del árbol al atardecer o amanecer.

    Un abrazo.

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  2. Sé, Anxe, que se puede sufrir con amor y con paciencia, y quizá con alegría, puesto en versión absolutamente elevada; sufrir de pura alegría, de placer (que puede ser otra cosa), eso no lo distingo con facilidad. Que el placer induzca al sufrimiento, es moneda curso corriente, trabajada y muy frecuentemente falsa.
    Pero bueno: acepto de buena gana el sistema que pareces entender. Que marche te deseo. Saludos muy cordiales.

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  3. Al, querido.. lamento que no sea del todo comprensible incluso para mi no lo es del todo y es que pienso, siento como humano, pero trataba con pocas argucias transmitir el sentimiento, una tanto fuerte que tuve ese preciso día...Era tan constante, tan fuerte tan a veces inquerido como un sufrimiento pero venido de su contrario y que daba en consecuencia una razón positiva... un sufrimiento de gusto.

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  4. Sí que lo es, amiga mía, y de algún modo, pues que casi roza el singular aspecto de la contradicción interna del sentir, o quizá mejor directamente del mundo de la paradoja, del que puede participar el escrito, el estado personal del ánimo. Al fin, no haces ahora sino dejarlo en suficientemente atmósfera. Te agradezco todo, tanto más que me meto en lecturas un tanto crípticas pero muy llamativas: estas que aquí trenzas. Me gustan ya.
    Todo un saludo y buen abrazo, Anxe.

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