jueves, 13 de diciembre de 2012

Hujkio o el nudo en la garganta

Nudos

No será necesario escribir demasiado, acerca de las millas que había que recorrer para llegar al sitio adecuado, mientras cercanos estuvimos uno con el otro, y al final.

Otra de esas frases que me llegan directo al corazón, sucesos tuertos y torturas propias, ¿para qué? Mas que para sentir que no hay nada más. A veces siempre, a veces poco, pero sin embargo, a veces corto.

¿Por qué dejar de preguntarse? Cada mínima expresión de una frase, entusiasmo y risa.

Te amaba, porque pensaba que entendías, que comprendías, que la percepción de ciertas cosas eran así, porque al buscar la perfección podía sentirse la añoranza, la triste y llana soledad. Pero de la mano.

Soy sola sin equivocarme, sin arrepentirme, mas de todo lo que sucedió después de esos esfuerzos, sacrificios y hasta muertes en vida, presionando sin ver, por ingenua y torpe forma de reaccionar ante lo que no puede estar bien.

Derrumbar una vida por comodidad a mis aspiraciones, que no son ni eso, tan tristes desastres azoran a la verdad que no hay ni un gramo de luz que ilumine el destino, ni al caso que entienda la misma mordaza, la tuya y la mía.  Nada, ninguna respuesta.

¿Para qué? Para que continué esta malograda y triste desgracia, porque no hay gracia en la aburrida tozudez,  no hay gracia en el exterior, todo es interno, invisible y casi casi inexistente.

Como lo decía, hacerle un nudo al tiempo, para que pudiera entonces escribir de vez en cuando algunas verdades que suenan a esperanza, algunas fantasías que parecen hipocresía y unas cuantas otras, que suicidan para darnos a conocer la verdad de nuestras flaquezas.

Nada aún.


 [de la mano, desamor, desilusión, león, nudos, nudos de garganta, pareja, tristeza]

2 comentarios :

  1. Pues lo encuentro muy interesante, doña.
    Gracias. Saludos.

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  2. La pirata justiciera17 de diciembre de 2012, 16:10

    Muchas pero muchas gracias por leerlo y por comentarlo. Te agradezco Don.

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