miércoles, 1 de junio de 2011

Una carta pasada...

Sacando mis cartas

Muy bien, he decidido alejarme, sus condiciones no me agradan, no creo que alguien deba ponermelas, es más ni siquiera creo que me quiera. Se dice que el amor sólo puede realizarse cuando la entrega es mutua, pero la pregunta que surge es:

¿La entrega de que aspectos? Se supone que si es una entrega TOTAL, pero es ¿eso verdad? Todo tu ser se entrega a otro. Ni hablar.

Probablemente estoy más equivocada en cuanto a entregas. Yo espero alguien con quien platicar, alguien que confíe en mi, que de en la relación, que respete mis deseos. Espero hacer lo mismo. Quiero entregarme a ese alguien que valga la pena, con amor, sin miedo. De perderle, con confianza y con plena ilusión de que el conocimiento entre los dos florecerá. ¡Valgame, que Cursi! Casi como la relación del Tu y el Yo. Más es lo que deseo.

Mis aspiraciones se ven limitadas por una traba de índole generacional. Mi guardar, es hoy un problema. Ya me he cansado de todo que EL HOMBRE me ha dicho, ¡HA! incluso enferma, si voy a la iglesia, inmediatamente se dice que soy FANÁTICA.

Y bueno qué más...

Debería quejarme por ser diferente, más sé que a todos les pasa, por más que intenten todos sin excepción han salido lastimados. La pregunta es:

¿Voy a sobresalir?

Tengo una idea fija, energía y espero tener inteligencia. Si Dios quiere vida, y si también quiere estaré tranquila. Realmente nunca he podido escribir algo que sea apreciado por las letras, en esa la literatura. Carezco de muchas habilidades que me hacen falta. Sólo practicando lo lograré. Como nadar.

Practicando, estudiando y teniendo un ejercicio más fuerte de lo que QUIERO. Suena egoísta, pero sólo así dejando claro la actitud con la que quiero o creo sobresalir, espero lograrlo. Por mucho se notan las diferencias, cada ser humano ofrece una barrera que conocer, un reto para tirar. Es emocionante, aunque ahora carezca de defensas tan fuertes como antaño para hacerlo.

Más la habilidad de hoy día es aún mejor, puedo hacerlo y mi debilidad y mi baja guardia se rompe, deja pasar al individuo y se restituye haciendo que quede atrapado.

¿Pero es verdad lo que acabo de escribir?

La alegría con que un poeta escribe, esa energía, ese comunicar ¿es real?, ¿de donde sale? ¿Son una fuente que se agota? Relacionar las cosas, las circunstancias, no son más que roces de una casualidad imperante de mi desconcertante modo de percibir.

Que si soy así, que si no analizo, que carezco de lógica y que incluso no se amar. Realmente no me importa.

Acompaña a mi ser, otro ser, más grande que lo que yo misma imagino ¿Me querrán?

Eso si no lo sé. Solo debo tener confianza en la filosofía de Dios. Me levanté con está frase en la cabeza. Supongo que veré recompensada mi FE, mi ESPERANZA. A lo mejor no en esta vida. Pero creo que puedo hacer más que eso para que Dios me consideré.

Claridad en palabras, una tras otra podría tener significancia y voz.

Un voto por lo bello

       Un grito por los momentos perfectos

             Un beso al amor

                   Una entrega total a la ternura

                            Un abrazo apretado y cariñoso

                            al sentimiento de protección.

A la calidez, a la armonía, a ese calor embriagante de solo AMOR y una GLORIA a DIOS por crearlo y una OVACIÓN MÁS porque me ha permitido sentirlo. Nada más glorioso, nada más llenante, embriagante, hartadez, haito.

Así quiero sentir, así pretendo vivir recordando, sintiendo. Hoy sólo tengo que leer esto para sentir la pasión por entregarme a mis convicciones, a mi ser Yo. A lo que soy y a lo que he sentido. Porque más de lo que yo pueda hacer, la renovación de un sentimiento cada vez más edificante, gratificante y lleno de gozo. Es que brinque mi corazón, brote mi pulso, mi respiración cambie, vaya a ritmo agradable no apacible, no pasivo, más confirmante de viveza, de amor, pasión y emoción.

¡Hay vida en Mi! Existe la palabra y solo tengo que mencionar TRANQUILIDAD, ARMONÍA, FE, ESPERANZA.

Nadie me da más confianza que mi Dios, nadie me da más cobijo que mi madre, mis padres, mi familia y yo misma.

¿Hace cuanto que no veo el techo de mi cuarto? ¿Por qué camino tan encorvada? Es mi perspectiva es mi mundo reducido. Quisiera enamorarme, más no lo será, mi esperanza aún no se denota, aunque muchas cosas en contra las hay.

Espero que mis últimas pláticas sean parte verdad,parte mentira. Mmmh... no se que pensar. Y decido alejarme solo para ver que pasa.

Si lo sé, Dios tiene destinado algo muy bueno para mi. Una vida cotidiana llena de amor. No me importa el éxito. Prefiero la docilidad de un buen encuentro. De alguien que valore quien soy, sepa quien soy. Y respete mis convicciones.

Soy bastante ruda para ser amable como deseo

¿¡Más que hacer!?

(7 enero 2002)

Alicia la de Wonderland

(alicia,cartas, los quiero)

No hay comentarios :

Publicar un comentario